
Los ciegos aceptaron gustosamente este alfabeto, y a pesar de
que al principio los profesores videntes no veían con buenos ojos el sistema
creado por Braille debido a que presentaba enormes diferencias con respecto a
la escritura común, pronto reconocieron que este alfabeto era el más adecuado
para los ciegos.
Así, el Braille se extendió rápidamente por Europa y por los
demás continentes y fue adoptado en todas las escuelas y centros para
invidentes.
No hay comentarios:
Publicar un comentario